Amazon podría enfrentar una nueva investigación por trato a proveedores de alimentos en Europa
Amazon podría enfrentar una nueva demanda en Europa, derivada de una amenaza impuesta por el regulador de alimentación en el Reino Unido.
Amazon podría enfrentar una nueva demanda en Europa, derivada de una amenaza impuesta por el regulador de alimentación en el Reino Unido.
La autoridad británica ha hecho una advertencia a Amazon y señaló que iniciará una investigación si el gigante de retail no toma acciones para mejorar el cumplimiento de código de la industria enfocado en la protección de los proveedores.
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Los señalamientos están sustentados por una encuesta anual implementada por el Adjudicador de Código de Alimentación (GCA, por la siglas en inglés del organismo), quien explicó en su informe de este 2024 que menos de la mitad de los participantes en la consulta que brindan servicios a Amazon consideraban que la firma cumplía en su mayoría con el Código de Prácticas de Suministro de Alimentación (GSCOP).
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Amazon cerca de nueva investigación por incumplir Código de proveedores de Alimentación
Este protocolo busca proteger el trato justo a los proveedores que brindan servicios a los 14 minoristas de alimentación más grandes de Reino Unido, mismo al cual Amazon se ha adherido desde el 2022.
No obstante, la corporación de venta online ha recibido una puntuación del 47 por ciento en el cumplimiento del código, la cual contrasta con el 59 por ciento previamente obtenido.
Al respecto, Amazon declaró: “estamos muy decepcionados por estos resultados y estamos comprometidos a mejorarlos”, según un portavoz de la empresa recuperado por Forbes.
Ante las evidencias, la GCA ha comenzado a presionar para que la empresa acusada tome “medidas rápidas y exhaustivas”.
Asimismo, el regulador anunció que estará monitoreando las acciones que tome Amazon para mejorar su cumplimiento del Código.
Mark White, Adjudicador del código, aseguró: “no dudaré en iniciar una investigación formal si es apropiado y necesario para asegurar que Amazon esté tratando a sus proveedores de manera justa y legal”.
La investigación podría derivar, además, en una sanción financiera de hasta el 1 por ciento de la facturación de Amazon en el Reino Unido.