La reforma al poder judicial es un parteaguas para que México tenga un mejor acceso a la justicia. El país ha entrado desde hace unos años en una época de cambio y de transformaciones, en donde la ciudadanía se vuelve protagónica, un hecho que se logra a partir de la erradicación de males que han aquejado a nuestro México desde hace ya bastantes décadas, tales como la corrupción, el autoritarismo, y el beneficio sólo a unos cuantos.
Descarga la revista Mundo Ejecutivo
Aunado, la presencia y el poder que las mujeres están teniendo en toda la escena política, económica y social, hacen que el rumbo cambie de manera importante, aunque aún no lo suficiente. Platicamos con Yasmín Esquivel, ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sobre el momento coyuntural que vive México, impulsado principalmente por la Reforma al Poder Judicial.
Con 40 años en el servicio público y 25 años en la impartición de justicia, señaló contundentemente que el Poder Judicial está un momento de cambio, de hecho, a su parecer, el más trascendente en la historia. Asegura que se trata de “un cambio que conlleva una transformación radical no sólo en su propia estructura y conformación, también en el origen popular que ahora tendrán quienes lo integran que nos permitirá su democratización”.
Influyentismo, corrupción, redes de familiares, nepotismo, falta de transparencia, dilación en la resolución de los asuntos, o un excesivo formalismo, eran situaciones que constantemente se denunciaban sin tener una solución positiva. Sin embargo, a raíz de la reforma constitucional del pasado mes de septiembre de 2024, estos hechos comenzarán a dejar de ocurrir.
Ahora, los integrantes de la Suprema Corte de Justicia, el tribunal de disciplina judicial, titulares de los juzgados de distrito y magistradas y magistrados de circuito serán elegidos por los ciudadanos.
Desde la perspectiva de la ministra, México ha transitado por distintas etapas, movimientos políticos y sociales que han marcado cambios importantes. “Estamos frente a un hecho inédito en la historia de nuestro país. Este cambio involucra una profunda transformación hacia la construcción de un Poder Judicial auténticamente democrático, en el que la legitimidad del juez descanse en la voluntad del pueblo; juezas y jueces sujetos al escrutinio público”.
Aunado, la llegada de nuevas generaciones de juzgadores le dará un rostro distinto al Poder Judicial. “México requiere una justicia cercana a la gente, una justicia de puertas abiertas; que privilegie la defensa de los derechos humanos de todas las personas, con una mirada más humana, particularmente sensible a quienes forman parte de los sectores más vulnerables de la sociedad”
refirió Yasmín Esquivel.
Enfatizó que la reforma busca terminar con un Poder Judicial alejado de la ciudadanía, con aquel que no responde a las necesidades y expectativas, que contribuye a no tener un acceso efectivo a la justicia como un Derecho Humano, tal y como lo marca la Constitución Política.
Aseguró además, que México necesita una justicia de puertas abiertas y que atienda las necesidades de toda la población. “Me duelen las desigualdades que advertimos en nuestra sociedad, el abandono de personas de sectores vulnerables, la invisibilidad de las mujeres, niñas y adolescentes víctimas de violencia, el abandono de niñas y niños”.
Está segura que desde la judicatura se puede contribuir a garantizar el acceso efectivo a la justicia. “Las sentencias tienen vocación transformadora, la posibilidad de modificar condiciones de nuestro entorno, modificar la realidad, a través de garantizar los derechos de todas las personas”.
Se requiere, dijo, personas juzgadoras que tengan una visión asentada en la realidad, en un entorno social y un contexto particular en cada controversia que llega a su conocimiento. Además, de que tengan contacto con las partes sin escudarse en el deber de una falsa imparcialidad, para negarse a escuchar a los justiciables.
Nuevas generaciones vs nuevos empleadores
CAMBIOS DE FONDO Y FORMA
Hablando sobre la participación de las mujeres en el Poder Judicial, evaluó que, si bien hoy en día hay cinco ministras, es necesario reconocer que “en el Poder Judicial Federal la presencia de la mujer, aunque ha crecido, todavía resulta insuficiente. No se cuenta con arriba de un 30 por ciento de mujeres juezas de Distrito o Magistradas de Circuito”.
Esta cifra, mencionó, responde en parte a una política patriarcal de siglos, en la que las mujeres no podían acceder a cargos de alto nivel, independientemente de la preparación o credenciales que tuvieran. Hoy, las mujeres rompen paradigmas, luchan y participan en lo económico, lo político, y por supuesto en lo social.
“Romper los techos de cristal, no ha sido fácil, se ha requerido de medidas tales como las acciones afirmativas; de sentencias que reconocen y tutelan los derechos de las mujeres, principalmente en materia políticoelectoral; de reformas constitucionales y legales”; recordemos que la paridad de género ya está inscrita en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Ejemplificó que ella, es la ministra número 12, y a lo largo de los 200 años de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, hoy día se pueden contabilizar 15 en total, cuatro de ellas designadas en el sexenio anterior.
Detalló que inicialmente, la promoción de un mayor número de mujeres como magistradas de circuito y juezas de distrito se realizaba a través de concurso reservados a la participación de las mujeres, o bien, se asignaba un cierto porcentaje del total de las plazas a concursar, así como también medidas que les permitiera permanecer en su lugar de residencia familiar o la más cercana a ella, pero esto, manifestó, no ha sido suficiente, derivado del poco impulso en el tema.
Con la reforma al Poder Judicial, la ministra está segura que se garantizará una participación mayor de las mujeres, así como la paridad en los órganos que lo integran. “Por ejemplo, para integrar el Pleno de la Suprema Corte de Justicia, que ahora estará conformado por 9 ministras y ministros, vamos a votar el día de la elección por 5 mujeres y 4 hombres. El diseño que plantea la reforma es tal que mira a la integración paritaria en todos los órganos del Poder Judicial”.
TRABAJA A FAVOR DE LA JUSTICIA
Para la ministra Yasmín Esquivel, México es un país con un futuro próspero, y sabe que es fundamental trabajar para que ello suceda.
Se describe como una mujer de trabajo, de esfuerzo, de convicciones, sensible al sentir de la ciudadanía sobre la falta de acceso a la justicia, sobre su inconformidad con el Poder Judicial, sobre sus juezas y jueces.
Finalmente, refirió que en lo profesional sueña con “contribuir a un México en el que la justicia sea una realidad para todas y todos, una justicia de puertas abiertas, cercana a las personas. Desde la judicatura podemos contribuir a garantizar el acceso efectivo a la justicia”.
Rosa María Verján Guiérrez