De acuerdo con una investigación del Centro de Rehabilitación Moment of Clarity, mascar chicle puede ser una terapia efectiva para aliviar el estrés y la ansiedad.
Según el doctor Raafat W. Girgis, psiquiatra con certificación triple en el Centro de Rehabilitación Moment of Clarity, mascar chicle puede ayudar a disminuir la respuesta del sistema nervioso que causa ansiedad, la cual puede manifestarse con síntomas como preocupación, miedo, angustia, nerviosismo, dificultad para concentrarse, entre otros.
Los estudios han demostrado que mascar chicle durante situaciones estresantes, reduce los niveles de cortisol plasmático y salival, lo que puede reducir el estrés mental.
Favorece la concentración y la memoria
Además, el proceso de mascar chicle aumenta los niveles de oxígeno en la sangre, en áreas clave del cerebro, como la corteza prefrontal y el hipocampo.
Estas áreas son responsables de procesar la información, la memoria y el manejo de las hormonas del estrés.
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También se ha observado que mascar de chicle aumenta el flujo sanguíneo en el cerebro, lo que puede estimular la actividad cognitiva; ayudar a enfocar la atención en aspectos físicos en lugar de mentales, cuando los niveles de estrés o ansiedad son elevados.
Beneficios adicionales de mascar chicle
De acuerdo con el estudio, el tiempo recomendado para mascar chicle es de aproximadamente 20 minutos, y hacerlo antes de enfrentar una actividad estresante puede ayudar a calmar los nervios.
Además de sus efectos antiestrés, mascar chicle también puede tener otros beneficios, como reducir el apetito y proteger los dientes.
Los chicles sin azúcar, especialmente los que contienen xilitol, pueden ayudar a reducir la inflamación de las encías y complementar el cepillado dental.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que mascar chicle con sabor a menta puede disminuir el deseo de comer frutas, lo que podría afectar negativamente la ingesta de una dieta saludable rica en nutrientes.
Ansiedad y salud mental en el mundo
Cabe mencionar que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de mil millones de personas en todo el mundo padecen una enfermedad mental; siendo la ansiedad una de las que se manifiestan con mayor frecuencia y la cual se incrementó en un 25% en el primer año de la pandemia.
Entre los padecimientos mentales más comunes en México y el mundo se encuentran la ansiedad y la depresión, que afectan al 15% de la población, y se prevé que para 2030 sean la primera causa de discapacidad mental en jóvenes y adultos entre 18 y 65 años.
Según la revista científica The Lancet, la salud mental representa un importante gasto para la economía de varios países a nivel mundial, y se prevé que para el 2030, el costo en los tratamientos supere los 6 billones de dólares al año.