La franquicia priista para Alito

Finalmente, este domingo, a votación a mano alzada de más de 3,200 delegados, la Asamblea Nacional del PRI aprobó que los titulares de la Presidencia y la Secretaria General de partido duren cuatro años y puedan reelegirse hasta por tres periodos consecutivos, lo que permitiría que Alejandro Moreno y Carolina Viggiano permanezcan en sus cargos hasta 2032.

Asimismo, el presidente del partido podrá designar a los coordinadores parlamentarios y controlar las deudas del partido.

Muchas voces en contra se escucharon en los días previos, como las de Manlio Fabio Beltrones, Dulce María Sauri, Aurelio Nuño, Francisco Labastida, entre otros, todos adelantando que no asistirían a la Asamblea a convalidar que “Alito” pueda presidir el PRI hasta por 13 años.

La realidad es que, aunque hubieran asistido y dejado entrar a los inconformes que se manifestaron a las afueras del World Trade Center, no hubieran podido impedir que se impusiera una mayoría afín al campechano.

Alejandro Moreno, junto con el matrimonio Carolina Viggiano y Rubén Moreira, han consolidado su poder dentro del partido, más que por sus resultados, porque se han ido quedando solos. Entre priistas que migran a Morena, otros que renuncian y unos más que expulsan, la actual dirigencia del PRI no tiene oposición interna, como se vio este domingo.

No sólo eso. Sin miedo a nadie, Alejandro Moreno está dispuesto a sacar a más priistas del partido, lo que dejó claro en su discurso contra el “peor lastre” del PRI, al referirse a quienes “estuvieron al frente cuando castigaron al PRI con el Pemexgate.

Hay militantes del PRI vinculados al asesinato de nuestro candidato presidencial”, en clara alusión a Sauri y a Beltrones, a quienes al parecer invita a seguir el mismo camino que Osorio Chong, Eruviel Ávila, Claudia Ruiz Massieu…

Con el PRI más debilitado en su historia y apenas salvándose de un final como el del PRD, “Alito” ha manifestado su intención de cambiar el nombre del partido y buscar respaldo de los jóvenes.

Sin embargo, hoy por hoy, el PRI, o cómo le quieran llamar, se ve más próximo a desaparecer como el partido del sol azteca o, a lo mucho, a ser un membrete que se mantenga del presupuesto con las dos gubernaturas, presidencias municipales, escaños y curules que le quedan, dependiendo de alianzas que le ayuden a sobrevivir como el PT y con “Alito” como dirigente a perpetuidad, como Dante Delgado en MC o Alberto Anaya en el citado PT.

Y quien quita que las circunstancias se dan para tener el éxito de Jorge Emilio González, el “Niño verde” en el PVEM.

Francia, pese a la derrota resurge la ultraderecha

Al final todo quedó en una bomba de humo. La amenaza del regreso de la ultraderecha a Francia quedó sólo en eso, en una amenaza. Los acólitos de Marine Le Pen, afiliados al partido Reagrupamiento Nacional (RN), no consiguieron los votos suficientes para dar la sorpresa y no sólo eso, luego de ser los favoritos terminaron desplazados hacia una tercera posición.

En mucho habrá que darle las gracias a la estrategia puesta en práctica por la izquierda encabezada por el Nuevo Frente Popular (NFP), al final la agrupación ganadora, quien logró atraer el voto de los indecisos y de la disidencia de Ensemble, el partido del presidente Emanuel Macron, quien respira momentáneamente porque aún deberá establecer un gobierno de coalición.

La inusual participación favoreció a las fuerzas progresistas. El 66% de los franceses emitió su voto, la cifra más alta para una segunda vuelta en lo que va del siglo, aun siendo época vacacional. También la derecha colaboró al retirar algunos de sus candidatos en distritos en donde no tenía posibilidades de ganar evitando así dividir el voto.

Aunque suene a una derrota en el balance final se registra un gran avance de la ultraderecha la cual ahora contará con 143 escaños en la Asamblea Nacional contra los 88 que obtuvo durante el pasado proceso electoral, sin embargo, no deja de ser doloroso haber pasado a la segunda ronda como la gran favorita para terminar perdiendo en el alargue.

Empezarán ahora las negociaciones entre Macron y el NFP para poder establecer una coalición que, pese a las coincidencias, se antoja complicada debido a las diferentes visiones con relación a la economía del país. La clave se encuentra en encontrar al hombre ideal para ocupar el cargo de primer ministro, un hombre que sea capaz de sentar en una misma mesa a los diputados de la izquierda radical con los socialdemócratas.

Con todo, este es el mejor de los escenarios para Macron quien se hubiera encontrado en un verdadero entuerto de haber triunfado las fuerzas de Le Pen con la inauguración de los juegos olímpicos ya en puerta.

Un llamado de atención a los franceses, particularmente los más jóvenes, quienes de a poco han dejado ir perdiendo sus valores fundacionales, esos por los que ha sido considerada la fuente de los derechos del hombre.

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