Mientras Biden se va, la atención se centra en la edad y visión de Trump
Casi el 60% de los votantes estadounidenses expresó el mes pasado que Biden debería ser reemplazado “definitivamente” o “probablemente”.
Con 78 años, Donald Trump seguramente se enfrentará a un candidato demócrata más joven que él. Esto podría afectar su posición en relación con las cuestiones de edad y agilidad mental que anteriormente se centraban en Joe Biden.
La diferencia de edad entre Trump y sus posibles oponentes demócratas, como Kamala Harris (59 años), la gobernadora de Michigan Gretchen Whitmer (52 años) y Josh Shapiro de Pensilvania (51 años), podría convertirlo en el foco del deseo de los votantes de un traspaso generacional del poder.
El enfoque en la agudeza mental de Trump
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Con la salida de Biden, las apariciones públicas y a menudo vacilantes del expresidente ya no serán un punto de referencia. En su lugar, es probable que la atención se dirija a la agudeza mental de Trump y a sus discursos de campaña, que a menudo son confusos y divagantes. Por ejemplo, el mes pasado, Trump se equivocó con el nombre de su propio médico y anteriormente había cometido errores notables, como pensar que Barack Obama seguía siendo presidente y confundir a su rival republicana Nikki Haley con Nancy Pelosi.
Casi el 60% de los votantes estadounidenses expresó el mes pasado que Biden debería ser reemplazado “definitivamente” o “probablemente”, mientras que el índice de aprobación de Trump había aumentado al 40%. Sin embargo, el índice de aprobación de Harris se mantiene en torno al 39%.
La retirada de Biden trastorna varios aspectos de los cálculos republicanos. Ahora, Trump, posiblemente tendrá que debatir con Harris, la exfiscal, en septiembre, si ella recibe la nominación. La vicepresidenta demostró sus habilidades de debate en 2019 cuando lanzó un ataque muy personal contra Biden sobre la cuestión racial, lo que enfrió las relaciones entre ambos antes de que ella fuera nombrada vicepresidenta.
El comentarista político Anthony Michael Kreis publicó en Twitter/X poco después del anuncio de Biden: “No puedo creer que el Partido Republicano presente a un hombre mayor como candidato a presidente. ¡Qué vergüenza!”.
La reacción de Trump y el futuro de la contienda
La reacción de Trump a su reciente intento de asesinato –alzando el puño y gritando “¡Lucha, lucha, lucha!”– ha estado llena de vigor y ha ayudado a unificar a su partido republicano detrás de él. Sin embargo, después de su roce con la muerte, Trump prometió llevar adelante una campaña de “unidad”. Esa promesa se disolvió rápidamente cuando volvió a menospreciar a Biden, Harris y la agenda demócrata, lanzando diatribas en la campaña electoral, a menudo plagadas de teorías conspirativas e incluso una repetida y extraña referencia a un tiburón.
Después de que Biden anunció que abandonaría su intento de reelección, Trump respondió diciendo que su ahora exrival no era apto para postularse a la presidencia y “no estaba apto para servir”. La semana pasada, Trump dijo que no creía que sustituir a Biden por Harris “hiciera mucha diferencia”. Según dijo a Bloomberg, “la definiría de una manera muy similar a como lo defino a él”.
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El domingo, un Super Pac pro-Trump acusó a Harris de estar “participando” en un encubrimiento de la “decadencia mental” de Biden, y la caracterizó como la fuerza impulsora detrás de las políticas de la administración. El estratega demócrata Hank Sheinkopf dice que la respuesta “poco amable” de Trump a la renuncia de Biden es algo que los demócratas esperan que continúe mientras surge un sucesor de Biden.
“Trump está volviendo a ser el mismo de siempre. Biden está fuera de escena y Trump es el único que puede arrebatar la derrota de las fauces de la victoria”, dijo Sheinkopf. “Sin tener a Biden como oponente y llamarlo ‘Sleepy Joe’, ¿contra quién va a despotricar? La forma en que ataca a una mujer es muy diferente, pero ya se puede decir por la forma en que atacó a Biden el domingo que no está pensando con claridad. Su virulencia ha vuelto a apoderarse de él”.
Sheinkopf añadió que los demócratas podrán usar a Harris como una pieza clave en los suburbios del país, centrándose en el derecho de las mujeres a elegir y la libertad reproductiva, y esperar que Trump cometa un error reaccionando exageradamente para poder acusarlo de ser incapaz de controlarse debido a su edad.