Nuestro canalRetos y oportunidades de ESG y la transición energética
También es fundamental abordar la deforestación y la gestión de residuos, entre otras cuestiones, influir en las prioridades de gasto e inversión de los países. (ONU)
Por: Dr. Francisco Suárez Hernández. Director de Asuntos Públicos y Relaciones Estratégicas FEMSA y Asuntos Corporativos Negocios Estratégicos y División Salud. Ex Presidente del Consejo del World Environment Center.
Correo electrónico: francisco.suarezh@gmail.com
Durante el Energy Summit 2024, organizado por Neuron. Tuve el honor y el placer de moderar un panel dedicado a la Transición Energética y de ESG (Environmental, Social, and Governance).
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Agradezco a los panelistas, por compartirme una diversidad de experiencias y perspectivas desde diferentes industrias donde se enfocaron en temas como:
Partimos de una premisa fundamental EL GRAN RETO de nuestra generación es:
La transición energética de base fósil a renovable.
Tenemos que triplicar las energías renovables rápida y responsablemente, en los próximos seis años para cumplir los objetivos de seguridad climática y energética. Considerando temas sobre permisos, uso de la tierra, aceptación de la comunidad y biodiversidad.
El cambio climático y la transición energética
Son una prioridad desde la perspectiva de sostenibilidad a nivel mundial y son importantes para las estrategias del sector privado en la región (LATAM).
El Foro Económico Mundial y la ONU
Estiman que la transición mundial requerirá inversiones anuales de $9.2 trillones de USD para 2050, en el sistema energético, la movilidad, la industria, los edificios, la agricultura, la silvicultura y otros usos de la tierra.
América Latina y el Caribe están comprometidos con la acción climática, con una reducción de emisiones para 2030 de entre el 24% y el 29%. Para avanzar será necesario elaborar estrategias globales que incluyan:
Sectores energéticos, transporte y agroalimentario.
También es fundamental abordar la deforestación y la gestión de residuos, entre otras cuestiones, influir en las prioridades de gasto e inversión de los países. (ONU)
Cumplir los compromisos nacionales, es esencial para evitar un aumento de la temperatura de 2.5°C. Hay dos brechas de emisiones: los objetivos insuficientemente ambiciosos, y la implementación. La trayectoria de emisiones y las políticas actuales no están en línea con los objetivos internacionales. (ONU)
El sector privado es clave. Estrategias, innovación y proyectos sostenibles forman parte de las iniciativas para la transición energética y descarbonización.
Recomendamos, que todas las organizaciones deben preguntarse y enfocarse en:
En los retos de cada industria para descarbonizarse y la importancia del ESG en las estrategias de negocio y sus presupuestos, tenemos influencia por regulaciones más estrictas, mayor transparencia, información para inversionistas y analistas. Comunidades y consumidores más informados, activos y digitalizados, que han generado que las empresas implementen estrategias con mejores resultados y de manera integral.
Sobre algunos factores externos que están en proceso en el ámbito del ESG por región o país:
Europa: regulaciones para requerir más transparencia y definir metas de reducción para sectores económicos y empresas
USA: La propuesta de la SEC (Securities and Exchange Commission) de tener más exigencias para reducción de emisiones (transparencia e involucramiento de la cadena de valor).
Inversionistas y analistas: Posturas como las de BlackRock y Sustainalytics de solicitar más información sobre las estrategias de reducción de emisiones e iniciativas claras de impacto.
Considerando las variables externas mencionadas, la gran pregunta: ¿Qué elementos relevantes debemos considerar para desarrollar una exitosa estrategia de ESG?
Por ejemplo, nos compartió Enrique, que, en 2023, el cemento “Vertua”, producido con menores niveles de CO2, representa ahora el 56% del total de volumen de cemento producido en Cemex (el objetivo era 50% en 2025). En 2022 representaba 41%.
El rol de cada sector es enorme. En el panel concluimos que, para realmente lograr mover la aguja de nuestro reloj sostenible,
se requiere un esfuerzo multisectorial. Apalancado de cada ciudadano solidario y sostenible,
desde cómo planea su consumo de alimentos, construcción de vivienda, revisa la huella de su transporte terrestre y aéreo, como proyecta sus inversiones en casa para tener energía solar o renovable. Así todos podemos crear:
¡¡¡Un planeta sostenible!!!
