Con una contribución significativa al Producto Interno Bruto (PIB) y generando miles de empleos, esta industria no solo se ha destacado por su tamaño y alcance, sino también por su creciente compromiso con la sostenibilidad.
Importancia económica
En términos de su impacto económico, la industria refresquera en México registró ventas de aproximadamente 18,903 millones de litros de refresco al cierre de 2018, con un crecimiento compuesto anual de 2.09% entre 2014 y 2018.
Este sector representa alrededor del 3.43% del total de empleos en la industria manufacturera, con más de 131,396 empleos directos (FOOD TECH) (InformaBTL).
La inversión en activos fijos durante el período de 2012 a 2018 ascendió a 79,842 millones de pesos, reflejando una tendencia de crecimiento constante (FOOD TECH).
Además, la industria de bebidas, incluida la refresquera, aporta un porcentaje significativo al PIB del sector manufacturero.
Según datos de la consultora KPMG, la industria refresquera ha mantenido una tasa de crecimiento anual de 1.3% en los últimos cinco años, a pesar de los desafíos económicos y las regulaciones fiscales como el IEPS.
Empleos y beneficios sociales
El sector no solo es crucial por sus cifras de ventas y su aporte al PIB, sino también por su capacidad de generar empleo.
Aproximadamente uno de cada 34 empleados en la industria manufacturera proviene del sector refresquero (FOOD TECH).
Además, las empresas han invertido significativamente en programas de responsabilidad social, destinando más de 1,300 millones de pesos en iniciativas de salud, medio ambiente y educación en los últimos seis años (FOOD TECH).
Compromiso con la sostenibilidad
Empresas líderes como Coca-Cola FEMSA y PepsiCo han adoptado múltiples estrategias para hacer sus operaciones más sostenibles.
Coca-Cola FEMSA, por ejemplo, ha invertido en economía circular, logrando reutilizar más de 85,000 toneladas de resina reciclada en 2022.
La compañía también ha colocado bonos vinculados a la sostenibilidad, recaudando 9,400 millones de pesos para financiar proyectos ecológicos (Coca-Cola Femsa) (FEMSA).
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En este sentido, las empresas han reformulado sus productos para reducir el contenido calórico y mejorar la sostenibilidad. Han logrado una reducción del 7.2% en el contenido calórico de sus bebidas en seis años y han incrementado la proporción de bebidas bajas o sin azúcar (FOOD TECH).
También han invertido en tecnología para hacer sus operaciones más eficientes y menos dependientes de recursos naturales, como el agua y la energía (FEMSA).
Perspectivas futuras
A pesar de los retos, la industria refresquera en México sigue creciendo y adaptándose a las nuevas demandas del mercado y a las expectativas sociales y ambientales.
Con una fuerte inversión en sostenibilidad y responsabilidad social, el sector se posiciona como un pilar importante de la economía mexicana, con una visión clara hacia un futuro más sostenible.
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