Si tienes una tarjeta de crédito y deseas adquirir algo con ella o si estás pensando en pedir un préstamo, hay una serie de factores que debes considerar antes de firmar cualquier contrato relacionado o dar el “tarjetazo“, entre los cuales se encuentra el definir tu capacidad de pago.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), la capacidad de pago implica “identificar el nivel de deudas que una persona puede contraer sin riesgo a retrasarse o incumplir los pagos”.
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En este sentido, no basta con tomar en cuenta el límite disponible en la línea de crédito, las mensualidades o plazos a pagar y tus ingresos, debes hacer un presupuesto en el que tengas en cuenta tus gastos, ahorro y excedentes para tomar una decisión responsable.
Esta es la fórmula para conocer tu capacidad de pago de un crédito
La Condusef comparte un ejercicio que te ayudará a definir tu capacidad de pago y consiste en lo siguiente:
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Supongamos que tus ingresos mensuales fijos son de 10,000 pesos, tus gastos del mes ascienden a 7,000 pesos y tienes un hábito de ahorro mensual de 1,000 pesos.
Al armar tu presupuesto, deberás sumar tus gastos fijos mensuales y tu ahorro mensual. El total de esta operación, tendrás que restarlo a tus ingresos mensuales (después de impuestos). En el caso anterior, el resultado es de 2,000 pesos, por lo tanto, esta es la cantidad que puedes destinar al pago de un crédito.
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En resumen, la operación para definir la capacidad de pago es igual a:
Ingreso mensual – (gastos mensuales fijos + monto que se destina al ahorro mensual)
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