La depresión es un problema de salud mental que aqueja más a las mujeres que a los hombres, y quienes la padecen, suelen ausentarse de sus actividades laborales con mayor frecuencia, además de ver reducida su productividad dentro de la organización.
De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la depresión, al igual que el estrés y la ansiedad, están considerados como problemas de salud generalizados y es cuatro veces más común entre las mujeres.
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Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) indican que la depresión es la segunda causa de discapacidad y afecta a más de 264 millones de personas; y se prevé que para el 2030 será la primera causa de discapacidad. Además, el 30% de las personas con depresión no responde a los fármacos y tratamientos convencionales.
Según un informe del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, la depresión impacta en la manera de pensar y en el estado de ánimo de las mujeres; y el riesgo es mayor para quienes tienen cargas de trabajo excesivas, o se enfrentan a situaciones de estrés emocional por cuestiones económicas, violencia familiar o laboral, presión social, o por algún padecimiento de enfermedades crónicas.
Depresión en las mujeres
Asimismo, las mujeres entre los 25 y 45 años de edad tienen más riesgos de padecer depresión o ansiedad, sobre todo las jefas de familia que enfrentan mayores responsabilidades como el cuidado de los hijos, que además tienen que trabajar y se enfrentan a condiciones de inseguridad, presión o temor constante.
Cabe destacar que, datos de la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica (ENEP) revelan que, la depresión es la primera causa de atención psiquiátrica en México, y las mujeres registran prevalencias 4.8% más altas de padecer depresión y ansiedad en relación con los hombres.
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¿Cómo identificar la depresión?
Se considera que existe un cuadro de depresión grave cuando las mujeres presentan algunos de los siguientes síntomas durante un periodo significativo:
- Tristeza o vacío emocional la mayor parte del día
- Pérdida de interés por las cosas que antes disfrutaba
- Falta de energía o cansancio extremo
- Alteraciones del apetito o sueño
- Dificultad cognitiva
Es importante mencionar que la violencia de género es considerada como un factor de riesgo para la salud mental de las mujeres y un desencadenante de depresión, ansiedad, pensamientos autodestructivos e intentos de suicidio.
Finalmente, es importante identificar signos de depresión o ansiedad, a fin de recibir atención médica profesional para confirmar el diagnóstico y llevar un tratamiento adecuado para afrontar dicho trastorno.
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