El Senado de la República aprobó por unanimidad la primera reforma constitucional impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum, que eleva a rango constitucional la igualdad sustantiva de las mujeres y reconoce deberes reforzados de protección para mujeres, adolescentes, niñas y niños en México.
“El Estado garantizará el goce y ejercicio del derecho a la igualdad sustantiva de las mujeres”, especifica la enmienda en el artículo 4 constitucional. Entre los puntos destacados, la reforma incluye la paridad de género en los ayuntamientos y municipios, así como la creación de fiscales especializadas para investigar delitos de violencia de género.
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Aprobación del Senado: principales cambios y objetivos de la reforma
La reforma constitucional, según explicó César Alejandro Giles Navarro, investigador del Instituto Belisario Domínguez (IBD), propone también que las autoridades federales tengan facultades para intervenir en delitos de violencia de género, facilitando la protección de las víctimas. “Esta medida tiene el potencial de aumentar la seguridad y protección para las mujeres, especialmente en delitos relacionados con violencia de género”, indicó Giles Navarro.
Otro aspecto clave es la incorporación de la perspectiva de género en los organismos de seguridad y las fiscales del país. En el artículo 21 constitucional se especifica que todas las instituciones de seguridad pública deben actuar bajo principios de perspectiva de género, fortaleciendo los deberes de protección del Estado hacia las mujeres, adolescentes y niños.
La reforma constitucional también aborda la equidad salarial. En el artículo 123 se establece que “a trabajo igual corresponde salario igual, sin tener en cuenta el género de las personas”, estipulando además la creación de mecanismos para reducir y eliminar la brecha salarial entre hombres y mujeres.
Implementación de la primera reforma constitucional de Sheinbaum
Para implementar estas medidas, el Congreso de la Unión contará con 90 días para actualizar diversas leyes, como la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la Ley Federal del Trabajo y el Código Nacional de Procedimientos Penales, entre otras. Estas modificaciones, que deberán alinearse con la nueva reforma, buscan reforzar los derechos de las mujeres y la igualdad de género en el ámbito laboral y social.
Con estas enmiendas, México busca fortalecer la protección y derechos de las mujeres, afirmando su compromiso con una sociedad más justa e inclusiva, donde la igualdad sustantiva se convierte en un principio rector de la administración pública y la justicia.
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