Por Adrián Vega Márquez
Beber una copa de vino puede ayudar a relajarnos después de un día pesado, o, simplemente, puede brindarnos placer con su sabor; sin embargo, detrás de esto hay muchas cosas que se pueden apreciar. Por ello, Ana Luisa Suarez, brand manager de Vinos Wagner, y Mauricio Lamadrid, director general de la misma empresa, nos dieron una plática sobre lo que implica hacer un vino, así como la manera adecuada en la que se degusta.
El vino es un arte; el vino es una expresión del enólogo, de la tierra, del campo, de la gente que está detrás de él trabajando, y cuando llega la copa enfrente de nosotros lo que hacemos es tomarlo. No lo vemos, ni lo observamos, ni lo olemos, ni mucho menos decimos que nos gustó porque está equilibrado
Beneficios del vino
Muchas veces se piensa en el vino simplemente como una bebida alcohólica; no obstante, Luisa y Mauricio expusieron que este líquido aporta beneficios tanto para los hombres, como para las mujeres. Algunas de las ventajas es que ayuda a relajar y a dar longevidad.
Aunque el vino tiene beneficios, tampoco podemos abusar de su consumo. Por este motivo, Luisa comentó que para las mujeres es recomendable tomar una copa diaria. Esta cantidad la siguiere para fortalecer las arterias y el corazón. Por su parte, Mauricio aclaró que los hombres pueden tomar dos copas diarias.
Degustación del vino
Para apreciar por completo el vino se debe observar desde su apariencia, hasta su olor. Así, recomendaron que, antes de beberlo, se debe observar su color, es decir, no debe estar turbio. Posteriormente, se debe oler sin moverlo, pues esto nos ayuda a identificar los olores primarios. Para poder admirar los olores secundarios, se debe agitar y volver a oler.
Todo el proceso anterior demuestra que el vino no sólo es una bebida para pasar un tiempo agradable, sino que tanto su proceso de fabricación, como los ingredientes con los que se hace, lo convierten en una obra de arte.