Únete a nuestro canalVender en línea como actividad complementaria es cada vez más fácil
Emprender un negocio propio es el sueño de muchas personas que buscan una forma de autoempleo, pero también de quienes quieren iniciarlo como una fuente adicional de ingresos
Emprender un negocio propio es el sueño de muchas personas que buscan una forma de autoempleo, pero también de quienes quieren iniciarlo como una fuente adicional de ingresos. Para lograrlo con éxito es necesario tener en cuenta algunos puntos importantes.
Planificar el giro del negocio, así como definir los recursos de tiempo y dinero que podrán dedicarse al mismo, son factores clave para adentrarse en el ecommerce, una opción que se posiciona cada vez más por su capacidad de adaptarse a cualquier horario y por requerir de una baja inversión inicial.
Durante los últimos años, el comercio electrónico ha tenido un gran impulso que ha modificado el comportamiento de las personas, quienes han incorporado esta forma de compra y búsqueda de productos a su vida diaria. Durante 2022, el comercio electrónico minorista en México creció 23%, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) y se proyecta que continúe aumentando.
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Una gran idea para aprovechar este impulso y empezar a vender en línea de forma sencilla es hacerlo a través de un marketplace, lo cual permite apalancarse de la reputación del sitio, aparecer de forma orgánica o pautada en las búsquedas e incluso exportar los productos a otros países. Además, facilita la gestión de los procesos por lo que permite un balance con otros trabajos o actividades.
Es necesario tener presente que, al igual que cualquier emprendimiento, un negocio en línea requiere de dedicación, mantenimiento y buena atención al cliente. Además, se debe implementar una estrategia de marketing acorde al giro del negocio, que permita ampliar el público al que se busca llegar.
Para afianzar un negocio en línea existen tres puntos principales con los que los vendedores tienen que contar: evaluación del modelo de negocio y de la competencia, claridad de objetivos y contar con una estrategia de promoción. En cuanto al primer punto, es vital que antes de abrir una tienda se realicen búsquedas de productos similares a los que se desean vender para evaluar la disponibilidad, los precios y así evaluar el potencial del producto a vender.
Sobre los objetivos, no hay mejor práctica que planificar las actividades que requiere la tienda en línea —desde las fotografías de los productos para subirlos a la plataforma, hasta la cuestión del empaque y la logística de envío— lo que permite plantearse metas y cumplir con las tareas requeridas a medida que el negocio crezca.
Finalmente, promocionar los productos es fundamental para aumentar las probabilidades de venta y para posicionar la tienda. Para ello, herramientas prácticas además de estrategias que se sugieren a los vendedores para mejorar sus transacciones, por ejemplo, el uso de cupones de descuento para fidelizar a la clientela, así como la creación e impulso de redes sociales que ayuden a llegar a nuevos públicos.
Sumarse al comercio electrónico permite a las personas aprovechar la tendencia de crecimiento en el sector para consolidar sus propias tiendas o crear un emprendimiento exitoso. La venta por medio de plataformas digitales es cada vez más fácil, económica y rentable, por lo que generar un equilibrio con la rutina laboral está completamente al alcance de las personas.
