Un paso hacia la sostenibilidad financiera
El gobierno de Claudia Sheinbaum, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), ha ejecutado un importante refinanciamiento de deuda por un total de 123,437 millones de pesos. Esta operación representa el último movimiento del año en la gestión de las finanzas públicas y busca fortalecer el portafolio de deuda del país para los siguientes años.
Detalles de la operación
Según los informes, la operación de refinanciamiento incluye la recompra de varios instrumentos de deuda, tales como Cetes, Bondes F, Bonos M y Udibonos. De esta cantidad remodelada, 36,531 millones de pesos corresponden a vencimientos del 2025, mientras que 57,501 millones se asignan a vencimientos del 2026. Además, 29,405 millones están previstos para los vencimientos entre el 2031 y el 2033.
Un enfoque a largo plazo
La medida no solo busca cubrir los vencimientos, sino también extender la plazo promedio de la deuda reduciendo la presión a corto plazo. Con este refinanciamiento, el plazo promedio de la deuda refinanciada se extiende en un 2.89 años, lo que proporciona mayor estabilidad financiera a largo plazo.
Confianza del mercado
La respuesta del mercado a esta operación ha sido positiva, ya que la demanda total superó los 27,000 millones de pesos, lo que equivale a 2.09 veces el monto colocado. Es significativo mencionar que el nuevo Bono M de tasa fija pagará un cupón de 8.50 por ciento, lo que refleja el interés de los inversionistas en las obligaciones del gobierno mexicano.
Estrategia de manejo de pasivos
Con el refinanciamiento realizado, la SHCP concluye su estrategia de manejo de pasivos para el ejercicio fiscal del 2024. Este enfoque no solo busca optimizar la estructura de deuda pública, sino que también reafirma el compromiso del gobierno de mantener la deuda en una senda sostenible y en cumplimiento con los techos aprobados por el H. Congreso de la Unión.
Impacto en el gasto público
A lo largo de este año, el gobierno ha ejecutado diversas operaciones de refinanciamiento. A finales de noviembre, se realizó una operación similar por 152,400 millones de pesos dirigida a vencimientos entre el 2024 y el 2026; esto se hizo con la intención de reducir el riesgo de refinanciamiento y mitigar presiones por vencimientos de corto plazo. Desde inicios del año, el gobierno ha destinado más de 850,576 millones de pesos en el pago de intereses, lo que se traduce en un aumento del 8.9% anual.
Conclusiones
El refinanciamiento llevado a cabo por el gobierno mexicano no solo apunta a asegurar su estabilidad financiera, sino que también busca dar tranquilidad a los ciudadanos acerca del manejo de las finanzas públicas en un entorno económico global desafiante. Este tipo de estrategias son vitales para asegurar la sostenibilidad de la deuda en un contexto de tasas de interés que han comenzado a bajar tanto en México como en el resto del mundo.