Nuestro canalMes Rosa: adoptar hábitos saludables es clave para prevenir el cáncer de mama
La falta de ejercicio y consumir alcohol son factores de riesgo para el desarrollo del cáncer de mama
Octubre es considerado el Mes Rosa, dedicado a la sensibilización y concientización sobre el cáncer de mama, un padecimiento que se ha convertido en una de las principales causas de muerte en mujeres mayores de 25 años en México, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Además, se reporta que al año se diagnostican más de 29 mil nuevos casos que afectan la vida de miles de mexicanas, de las cuales 7 mil no logran superarlo.
Se trata de una afectación global que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cobra la vida de más de 670 mil personas cada año.
Descarga la revista Mundo Ejecutivo con Donald Trump en portada
Cultura de prevención del cáncer de mama
Este video te puede interesar
En el marco del Mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama y el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama que se conmemora el 19 de octubre, el Dr. Jimmy Gutman, presidente del Comité Científico Asesor de Immunotec, empresa especializada en salud y bienestar a través de la investigación científica del glutatión, comparte que la información y estudios relacionados con el cáncer de mama evolucionan día a día, permitiendo generar herramientas y conocimiento que ayuden a la prevención y detección temprana de la enfermedad.
“Hoy sabemos que una buena alimentación, chequeos constantes, la autoexploración y decisiones saludables, son claves para generar una cultura de mayor cuidado y consciencia desde temprana edad”.
El especialista añade que aunque en la actualidad se desconoce cuál es el detonante de enfermedades como el cáncer, sí se han detectado factores de riesgo que se pueden prevenir adoptando hábitos saludables para mejorar la calidad de vida, tales como los que se comparten a continuación:
1. Alimentación saludable
Una dieta balanceada, baja en azúcares y grasas, y alta en fibra es fundamental para una buena salud. Procura incluir setas, papaya, brócoli y otros alimentos naturales.
Iniciar con un estilo de vida más sano puede ser complicado, pero es muy importante adquirir hábitos que ayuden a prevenir enfermedades de alto impacto.
Un estudio de Immunotec en el que participó el Dr. Gutman, evidenció que la cisteína enlazada o bioactiva ayuda a disminuir los riesgos de desarrollar cáncer de mama y de próstata, debido a que ésta ayuda a la producción de glutatión para fortalecer el sistema inmunológico y proteger las células del daño oxidativo, por lo que se pueden incluir alimentos que ayuden a producirla.
2. Evitar el consumo de bebidas alcohólicas
El consumo de alcohol es un alto factor de riesgo para el desarrollo del cáncer de mama, por lo que es recomendable reducir su consumo y limitarlo a ocasiones especiales y procurar beber menos de una copa al día.
3. Realizarse la autoexploración
La autoexploración de los senos puede salvar tu vida; por ello es recomendable realizar estas revisiones una vez al mes después del quinto día de la menstruación, esto permitirá identificar tejidos extraños y conocer si algo no marcha con normalidad.
Es muy importante comenzar a conocer tu cuerpo y reconocer cualquier detalle que notes diferente, prestando especial atención a cambios en la forma de la mama, dolores, alteraciones en la piel, cambios en el pezón y secreciones. En caso de detectar algún signo extraño, es importante buscar atención médica inmediata.
4. Realizar actividad física
La falta de actividad física puede ser un de padecer cáncer de mama. Es importante destinar por lo menos 30 minutos diarios para realizar ejercicio o cualquier deporte que sea de tu preferencia.
Si no estás acostumbrada a realizar actividad física, no te presiones, recuerda que todo es un proceso y puedes comenzar por rutinas sencillas para ir subiendo de intensidad mientras cuidas tu bienestar.
A pesar de que el cáncer de mama es considerada una de las epidemias del Siglo XXI, una cultura de prevención temprana, concientización y observación, pueden marcar la diferencia al ofrecer mejores oportunidades de recuperación y mejorar el panorama para todas aquellas mujeres que viven con este diagnóstico.
