Culturalmente en México, el trabajo doméstico remunerado ha sido una ocupación primordialmente femenina.
De las 2.5 millones de personas mayores de 15 años ocupadas en estas actividades, el 90.2% equivalente a 2.2 millones son mujeres y 9.8% hombres, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo Nueva Edición (ENOEN) que elabora el Inegi.
Según el organismo, las personas ocupadas en el trabajo doméstico remunerado realizan labores de aseo, asistencia y actividades relacionadas al hogar de una persona o de una familia, a cambio de un salario.
El 48.3% de las trabajadoras del hogar tienen entre 30 y 39 años, seguido del 31.2% del rango de 50 a 64 años. En tanto que el 31% de los hombres de este grupo de edad se dedican a dicha actividad.
Actividades domésticas y de cuidado
Con cifras al cuarto trimestre del 2022; destaca que 1 millón 926 mil 836 personas, es decir, el 78.6% de quienes realizan trabajo doméstico remunerado se dedican a actividades de limpieza en casas particulares, además de otras actividades complementarias de aseo.
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El número de cuidadores de niños, personas con discapacidad y personas mayores en casas particulares ascienden a 254 mil 923, equivalente al 10.4% del total.
Mientras que 101 mil 287 personas se dedican a tareas de jardinería en casas particulares, de las cuales el 41.6% son mujeres. Por otro lado, hay 57 mil 015 choferes de los cuales 23.4% mujeres realizan esta actividad.
En lo que respecta al nivel de escolaridad, 28.4% cuenta con educación primaria; el 42.1% terminó la secundaria y el 5.6% de mujeres no tienen ninguna instrucción.
Informalidad y brecha salarial
Por otra parte, 2 millones 356 mil 934 personas, equivalente al 96.1% de quienes se dedican al trabajo doméstico remunerado pertenece al sector informal, principalmente el 92% como asalariadas informales, mientras que 3.9% son personas asalariadas formales; 3.8% trabajadoras informales por cuenta propia.
El 72.3% de las y los trabajadores domésticos tiene un contrato de base, planta o por tiempo indefinido; y 12.2% uno temporal.
En promedio, el ingreso mensual que perciben las mujeres asciende a 3 mil 829 pesos. La brecha salarial entre mujeres y hombres es evidente; ellas ganan 632 pesos menos que los varones ocupados en el trabajo doméstico, cuyo ingreso asciende a 4 mil 399 pesos mensuales en promedio.
Las personas trabajadoras domésticas remuneradas laboraron 33 horas a la semana en promedio; el 57.5% trabajó menos de 40 horas a la semana, 30% cumplió jornadas entre 40 y 48 horas y 10.6% tuvo jornadas semanales superiores a las 48 horas.
El 53.6% de las mujeres ocupadas en el trabajo doméstico remunerado laboró menos de 35 horas por semana y el 9.1% cumplieron jornadas de más de 48 horas en el mismo periodo.
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Acceso a prestaciones
El 74% de las mujeres ocupadas en trabajo doméstico no cuenta con prestaciones laborales, frente al 59.6% de hombres. Solo el 22.1% de ellas recibió aguinaldo como prestación laboral y el 6.9% tuvo vacaciones con goce de sueldo.
Finalmente, de los 37.3 millones de hogares en el país, el 4.3% contrató trabajadoras o trabajadores domésticos; el 96.2% lo hizo bajo un esquema de entrada por salida, y el 3.5% de planta.
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