La industria de la moda es la segunda más contaminante del planeta, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, la “fast fashion” o moda rápida, anualmente consume alrededor de 93 millones de metros cúbicos de agua en el mundo.
Este volumen es el equivalente para satisfacer las necesidades hídricas de cinco millones de personas en el mismo periodo.
Cabe mencionar que la moda rápida genera la producción en masa de grandes cantidades de ropa, a bajo costo, que responden a las tendencias globales.
Su modelo de negocio se basa en priorizar la cantidad por encima de la calidad, lo cual no sólo implica la confección de prendas con materiales dañinos al ambiente, sino el desecho de las mismas.
Darle un segundo uso a la ropa, permite ahorrar más de 17 millones de litros de agua por cada 1000 prendas que se reutilizan, de acuerdo con GoTrendier comunidad de venta de ropa de segunda mano en línea.
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Grandes consumos de agua
Desde la década de los 90, México es considerado como uno de los mercados más redituables para marcas famosas de fast fashion, siendo el principal país de Latinoamérica con más plazas comerciales, de acuerdo con Greenpeace.
En este contexto, Ana Isabel Orvañanos, Country Manager de GoTrendier México, mencionó que la manufactura textil requiere grandes cantidades de agua, pero hay prendas que requieren mayor volumen de agua para su producción.
“El primero de ellos son los jeans, un básico en el closet de todos los mexicanos; la elaboración de cada uno requiere de entre 7 mil 500 y 29 mil litros de agua; le siguen las prendas de algodón que gastan de entre 2 mil 700 y 10 mil litros”.
Residuos tóxicos
Aunado al consumo de agua, la industria de la moda produce grandes cantidades de desechos de colorantes y otros químicos, los cuales llegan a las fuentes hídricas y contaminan ríos, lagos e incluso el agua potable.
México Social asegura que en los ríos Lerma y Atoyac se han encontrado metales pesados en el vital líquido; como el cadmio y el cromo, los cuales pueden generar cáncer en el ser humano.
Además, la ONU compartió que cada año se tiran al mar medio millón de toneladas de microfibras como desechos de ropa, lo que equivale a tres millones de barriles de petróleo.
Por otra parte, México inició el 2023 con un déficit del 6% de este líquido vital en las 210 presas principales del país, según la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
De ahí la importancia de comenzar a crear conciencia sobre la importancia de los recursos naturales, sobre todo en cuanto al uso del agua.
Consumo responsable
Afortunadamente, cada vez más personas son conscientes respecto a la moda y están optando por as prendas de segunda mano.
Del 2020 al 2023, el mercado de ropa de segunda mano creció 4% en México, además el 50% de los consumidores de moda ha elegido ser más sustentable al comprar y vender en plataformas y tiendas en línea, de acuerdo con Statista.
La plataforma GoTrendier, refiere que las personas entre 13 y 17 años, son quienes comienzan a aparecer con fuerza dentro de sus usuarias, lo que da una esperanza más a la situación ambiental, pues las generaciones Alpha y Z son más receptivas a las necesidades sostenibles que requiere el planeta.
Las nuevas generaciones prefieren inmediatez sobre precio en eCommerce
“Actualmente miles de mexicanas se suman a alternativas sostenibles, en 6 años GoTrendier ha logrado crear una comunidad de 7 millones de usuarias quienes, sólo en 2022 tras la venta de 4.5 millones de prendas, ahorraron 79.5 millones de metros cúbicos de agua, con lo que podríamos llenar 31 mil 800 albercas olímpicas”, agregó Isabel Orvañanos.
Al generar conciencia sobre la economía circular y la reutilización de la ropa, existe una gran oportunidad de reducir el impacto de la moda en el medio ambiente; hacer un vaciado del armario de las prendas que todavía están en buen estado para buscarles un segundo dueño, es otra forma de sumarse a estas iniciativas, finalizó la directiva.
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