Manejo de emociones en el lugar de trabajo
Expresar tus emociones de manera asertiva puede ayudarte a reducir los niveles de estrés y mejorar la comunicación con tus colaboradores.
¿Te ha pasado que tienes pensamientos recurrentes que sientes que no puedes controlar, pero prefieres reprimirlos antes que exteriorizarlos en el trabajo por temor a que se burlen de ti?
Muchos colaboradores están pasando por lo mismo que tú, así que los profesionales de la salud recomiendan hablar este tema de manera asertiva.
Puedes acercarte a tu líder inmediato, con algunos compañeros del equipo o con el área de Recursos Humanos para solicitar apoyo.
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Reprimir las emociones en el trabajo puede tener varias consecuencias negativas, entre ellas aumento de estrés, lo que con el paso del tiempo puede provocar problemas de salud física y mental.
Empresas estarán obligadas a cuidar la salud mental de los colaboradores
También ocasiona una disminución en la productividad al dificultar la concentración en las tareas laborales.
Cuando se reprimen las emociones, puede ser difícil comunicarse de manera asertiva y clara con los colegas, lo que genera malentendidos y conflictos laborales.
Todo esto en conjunto puede provocar insatisfacción laboral y, en el peor de los casos, un despido.
Recomendaciones para expresar tus emociones en el trabajo
Entonces, ¿qué se puede hacer al respecto? Te compartimos cinco recomendaciones que pueden ayudarte a expresar tus emociones de mejor manera y con ello evitar que te afecten en el trabajo.
1. Toma consciencia de tus emociones
Reconoce tus emociones, y sé consciente de cómo podrían afectar tu comportamiento y desempeño en tu lugar de trabajo.
2. Descansa
Cuando te sientas abrumado o estresado, tómate un breve descanso para hacer algo que te ayude a relajarte, como salir a caminar o practicar ejercicios de respiración profunda para tranquilizarte.
3. Haz ejercicio
El ejercicio regular puede ayudar a reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo, lo que facilita el manejo de las emociones en el trabajo.
4. Habla con alguien de confianza
Compartir tus emociones con una persona de confianza puede ayudarte a procesarlos y obtener una perspectiva diferente, lo cual puede facilitar su manejo en la oficina.
5. Busca ayuda
Si tus emociones interfieren con tu capacidad para funcionar en el trabajo, considera buscar la ayuda de un profesional de la salud mental, como un terapeuta o un consejero.
Estos especialistas pueden brindarte herramientas y estrategias para manejar tus emociones y mejorar tu bienestar en general.
