México impulsará acciones para cerrar las brechas de género en industrias y comercio
A fin de alcanzar un crecimiento económico sostenible, diversificado e incluyente, México impulsará una política industrial con perspectiva de género e inclusión
Las desigualdades que existen entre mujeres y hombres en diversos ámbitos constituyen las llamadas brechas de género. Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que plantea la Agenda 2030, es alcanzar la paridad de género, es decir, que mujeres y hombres tengan las mismas condiciones y oportunidades.
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En este contexto, en la Reunión de Ministros de Comercio e Inversión del G20, celebrada en Brasil, se abordó el tema de ampliar las oportunidades para las mujeres en el comercio global, e impulsar mecanismos para cerrar las brechas de género en diversas industrias.
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En la reunión de carácter internacional, en la que estuvo presente, el subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía (SE), Vidal Llerenas Morales; el Gobierno de México, anunció que a fin de cerrar las brechas y alcanzar un crecimiento económico sostenible, diversificado e incluyente, impulsará una política industrial con perspectiva de género e inclusión.
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Política de desarrollo productivo e industrial
De acuerdo con la SE, la política de desarrollo productivo e industrial del país tendrá como ejes transversales: la reducción de la desigualdad de género y el impulso de políticas de cuidado.
De igual manera, la Secretaría de Economía, se centrará en las siguientes acciones:
- Impulsar la capacitación de mujeres en sectores y habilidades clave.
- Incorporar políticas de cuidado desde los sectores industriales y empresariales para consolidar el Sistema Nacional de Cuidados.
- Promover una planeación territorial con perspectiva de género en los Corredores del Bienestar que garantice la conciliación familiar de las personas trabajadoras que tienen responsabilidades de cuidado.
Capacitación con perspectiva de género
En lo que respecta a la capacitación, destacó que se impulsarán acciones para fortalecer la capacitación técnica, formación y acompañamiento de las empresas para el reclutamiento de mujeres en sectores que históricamente han sido dominados por el género masculino, tales como industria manufacturera, siderúrgica, automotriz, aeronáutica, agropecuaria, energética, de comercio, servicios financieros, economía circular, entre otras.
De igual manera, se fomentará el desarrollo de habilidades interpersonales como el liderazgo o la negociación, a fin de garantizar la inclusión de las mujeres en posiciones de toma de decisión de las empresas, consejos de administración y cámaras empresariales que les representan.
Acciones para cerrar las brechas de género
Asimismo, se promoverá la coordinación entre niveles de gobierno e instituciones, para considerar la planeación integral del territorio con perspectiva de género, que contemple elementos como la vivienda, y el transporte urbano, con el propósito de acercar a las personas trabajadoras los sistemas de cuidado, lo que promoverá, en particular, el empoderamiento económico de las mujeres.
Adicional a lo anterior, buscará la coordinación entre la Secretaría de las Mujeres y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social para generar un acuerdo en materia de cuidados dentro de las empresas; así como ampliar las licencias de paternidad para promover la redistribución del trabajo de cuidados.
Algunos datos importantes
Cabe mencionar, que pese a los avances que ha tenido México en la incorporación de las mujeres a la fuerza laboral, con un incremento de 7% entre 1995 y 2022 de acuerdo con el Inegi, aún persisten desafíos importantes.
Según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022, las mujeres tuvieron un ingreso promedio corriente 43.1% menor que los hombres.
Por otra parte, el Censo Económico del Inegi, evidenció que en el 2018 la fuerza laboral femenina en el sector de la construcción es del 12.9%; mientras que en el sector de transportes, correos y almacenamiento, la participación de mujeres fue del 17.9%
Finalmente, en cuanto al trabajo no remunerado en materia de cuidados, se estima que equivale al 24.3% del PIB nacional y es desarrollado principalmente por mujeres.