Los 7 pecados capitales de Deloitte

El liderazgo en servicios profesionales tiene reglas de oro, cuando se rompen llegan pecados capitales; estos son los de Deloitte.

• Orgullo

Por años, Deloitte México había gozado de la fama de ser una de las mejores consultoras contables, siendo su prestigio un sello de garantía de auditorias realizadas donde la conclusión era “libre de errores”, lo cual afirmaba no cualquier despacho contable, sino el que presumía de ser la mejor, “donde lo ‘bueno’ no es suficiente”, dice. Ya no es así.

• Ira

Contrario a tomar los señalamientos como crítica constructiva ante hechos evidentes, cuenta que el director general de Deloitte se encolerizó y atribuyó los ataques a los propios clientes que, a su decir, quieren culpar a la consultora externa de no advertirles de lo que se venía y no asumir ellos sus decisiones erradas, además de presentarle información a modo a su equipo de auditores.

• Codicia

Pero los grandes clientes de Deloitte se fueron desmoronando. Porque resulta que entre ellos se encontraron a AlphaCredit, de José Luis Orozco y Augusto Álvarez; Crédito Real, presidida por Ángel Romanos y Unfin, de Rodrigo Lebois, todas sofomes caídas en desgracia en menos de un año, con irregularidades como faltantes, préstamos no autorizados y en impagos de deuda.

También tuvo en su cartera a Aeromar, de Zvi Katz, e Interjet, cuando estuvo encabezada por Miguel Alemán Magnani, ambas aerolíneas en quiebra y con problemas con el SAT; en el caso del nieto del expresidente, hasta con orden de aprehensión. Por años fue el auditor externo de Altos Hornos de México, desentendiéndose de sus auditorias en cuanto Alonso Ancira fue aprehendido.

• Lujuria

Francisco Pérez Cisneros, director general de Deloitte, pareciera no aprender o preocuparse de los errores, si es que así pudiera llamarse a las irregularidades cometidas por sus clientes y toleradas por la consultora que dirige, pues por lo visto habría cedido en otras ocasiones a dar dictámenes a modo sin temor a amonestación o señalamiento alguno, abusando de fungir como presidente del Consejo Mexicano de Normas de Información Financiera (Cinif), o incurriendo en conflictos de interés, como en el comité de auditoria de Grupo KUO, de Fernando Senderos, el cual preside Manuel Canal, quien tiene un pariente cercano trabajando en Deloitte.

• Envidia

Alguna vez se las tuvieron otras consultoras y despachos contables. Hoy ya no.

• Gula

Y es que la cartera de clientes era y sigue siendo grande, por lo que había que mantenerla y ampliarla en un mercado muy competido y complejo, particularmente con la mano dura implementada en este sexenio en el Servicio de Administración Tributaria (SAT).

• Pereza

En lugar de trabajar para corregir los errores y la laxitud en que ha caído Deloitte, evidenciada por una racha de clientes con problemas financieros y fiscales, Francisco Pérez Cisneros trata de justificar y cubrir las fallas evidentes de un membrete que parece vivir más de la fama que de un trabajo profesional.

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