Carlos Slim Helú y su familia han aumentado su participación accionaria en PBF Energy, una refinería de petróleo estadounidense.
Con esta acción, podrían estar posicionándose como los principales tenedores de acciones en circulación de la compañía, un lugar que hasta finales de mayo era ocupado por BlackRock, el administrador de fondos más grande del mundo.
Adquisiciones recientes y control accionarial
Control Empresarial de Capitales, una empresa de inversión familiar del multimillonario mexicano, informó la compra más reciente de 638,000 acciones de PBF Energy.
Estas adquisiciones, realizadas en dos operaciones valoradas conjuntamente en 28.1 millones de dólares, fueron documentadas ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC).
Con estas nuevas adquisiciones realizadas los días 14 y 17 de junio, el vehículo inversor de la familia Slim ahora controla poco más de 16 millones de acciones de la refinadora, lo que representa aproximadamente el 13.5% de las acciones en circulación. Esta cifra supera las 15.5 millones de acciones que BlackRock poseía en PBF Energy al 31 de mayo, que equivalían al 13% de las acciones en circulación según Bloomberg.
Durante los últimos seis meses, la familia Slim ha incrementado consistentemente su exposición a PBF Energy. A principios de año, el 19 de enero, la familia ya tenía 14.3 millones de acciones de la empresa. PBF Energy opera seis refinerías con una capacidad total para procesar un millón de barriles de crudo por día.
Diversificación de inversiones y crecimiento empresarial
PBF Energy es la segunda empresa más valiosa en la que Control Empresarial de Capitales tiene participación, siendo superada solo por la española Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), según información de Bloomberg.
Además, la familia Slim, a través de Control Empresarial de Capitales, posee participaciones en otras empresas como Talos Energy, Harbour Energy, Metrovacesa y, más recientemente, en la empresa de biotecnología ProKidney.
Carlos Slim ha expandido su cartera de negocios energéticos a través de múltiples empresas familiares, que incluyen desde gasoductos hasta la exploración y producción de yacimientos petrolíferos. Este ingeniero civil egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ocupa el puesto 17 en el Índice de Multimillonarios de Bloomberg, con una fortuna de 92,500 millones de dólares, lo que lo convierte en la persona más rica de México.
El empresario también controla América Móvil, el mayor operador telefónico de América Latina, que registró ingresos por 46,000 millones de dólares en 2023. Además, tiene participación en el sector bancario comercial a través de su brazo financiero Inbursa.
A través de su empresa Grupo Carso, Slim tiene una presencia significativa en el negocio de la construcción industrial y el sector minorista en México. Esta diversificación y expansión en distintos sectores muestran la estrategia de la familia Slim para fortalecer su posición financiera y aumentar su influencia en el mercado energético global.
Con estas acciones, la familia Slim no solo solidifica su posición en el mercado energético estadounidense, sino que también demuestra una clara intención de expandir su influencia y control en otros sectores estratégicos a nivel internacional.