Cuidado con la autoridad moral

En una paráfrasis de aquella frase de “Que no me vengan con que la ley es la ley” cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación echó abajo la reforma eléctrica, ahora el presidente López Obrador justificó la violación a la ley de datos personales al dar a conocer el teléfono de la corresponsal del New York Times, argumentando que “Por encima de la ley está la autoridad moral y la autoridad política”, y que lo volvería a hacer “cuando se trata de un asunto en donde está de por medio la dignidad del presidente de México.”

En el transcurso del sexenio hay una lista de mentiras, exabruptos, descalificaciones y ataques que forman parte sólo del capítulo de las conferencias mañaneras del presidente. Más grave aún que sus palabras están los hechos: la corrupción imparable, como el fraude a Segalmex, organismo al que le siguen encontrando irregularidades después del desfalco de más de 20 mil millones de pesos; las obras inútiles resultado de las ocurrencias presidenciales, como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas, la cancelación del aeropuerto de Texcoco, la megafarmacia, el INSABI; la opacidad de contratos y adjudicaciones; y qué decir de la violencia en aumento. 

Otro apartado importante es lo que involucra directamente la “dignidad presidencial”, empezando por ser el “rey del cash”, sin cuentas de banco ni declaraciones de impuestos; los negocios de gobierno que involucran a los hijos con un nepotismo que no se veía desde López Portillo -hasta en eso el referente setentero actual-; los señalamientos de vínculos con las organizaciones de narcotráfico sumado al mejor trato a los criminales que a sus adversarios políticos.

Todo lo anterior choca con las encuestas de popularidad de AMLO o las irreales que dan una ventaja de más de 30 puntos de la candidata oficial respecto a su rival. Pareciera que incluso una cifra más creíble de popularidad de 20 puntos menos fuera incomprensible para lo que estamos viendo, como si la mitad de los mexicanos estuvieran enganchados con el líder de una secta, sin darse cuenta que esos gurús y sus seguidores siempre terminan mal.

La justificación del presidente para violar la ley, y hacerlo como lo hizo, es una clara advertencia de lo que está dispuesto a hacer si, por ejemplo, el resultado electoral no le es favorable, no sólo porque no gane la elección presidencial, sino por no lograr la mayoría calificada en el Congreso. En los comicios del próximo 2 de junio no sólo debe haber un mensaje claro y contundente, sino también una defensa posterior del mismo, porque está visto que el señor no es un demócrata ni le importa la ley, y que si no le parecen los resultados hará lo que crea más conveniente, apelando a su autoridad moral presidencial.

Cinco retos de recursos humanos para 2024

Ampliación de beneficios y prestaciones, retención de empleados, desarrollo de liderazgo y capacitación, gestión de talento y adaptación a tecnologías emergentes, son los cinco retos de recursos humanos en México para este 2024, de acuerdo a una encuesta realizada por minu, la plataforma líder de beneficios para el bienestar financiero y pionera en el concepto de salario on-demand en nuestro país.

El estudio refiere que el 56% de los especialistas consultados identificaron la importancia de los beneficios y compensaciones para satisfacer, conservar y aprovechar el talento humano. No es de extrañar el porcentaje idéntico, considerando que la ampliación de beneficios va directamente ligada con la retención de los empleados.

Un 47% considera la necesidad de fomentar el crecimiento profesional como estrategia para fortalecer el tejido organizacional; mientras un 26% señala la importancia de mantener una gestión adecuada de los recursos humanos, con continua capacitación, en un mercado laboral competitivo. Por último, y no menos importante, el 25% subraya la urgencia de mantener a los colaboradores actualizados en un ecosistema digitalizado.

“Estos hallazgos reflejan la complejidad y dinamismo del panorama actual de recursos humanos, instando a las organizaciones a adoptar estrategias proactivas y tecnológicas para abordar los retos mencionados”, mencionó Nima Pourshasb, CEO de minu. El también cofundador de la startup, enfatizó la importancia de proporcionar a los trabajadores una plataforma digital que ofrezca una variedad de servicios personalizados para mejorar su bienestar integral de manera sencilla y práctica. “Nuestra herramienta permite a los colaboradores abordar de manera inmediata sus problemas financieros, contribuyendo así a mejorar su salud mental, productividad y compromiso con la empresa para la que trabajan”, concluyó.

Dos años de combates en Ucrania, y la guerra sigue…

El sábado pasado se cumplieron dos años de la ocupación rusa en Ucrania, en un conflicto que en realidad dio inicio hace una década cuando Vladimir Putin ordenó la anexión de Crimea. En ese momento un debilitado gobierno de Kiev se quedó pasmado y ante la sorpresa optó por buscar una salida negociada que nuca llegó, al final Moscú terminó por rearmar a las fuerzas prorusas en la zona ante una indignación de occidente que no se vio reforzada con pertrechos militares para auxiliar a las ciudades ocupadas. De haber reaccionado en ese momento tal vez hoy la historia hubiera sido diferente.

Ocho años después, Vladimir Putin intentó revivir su aventura, pensó que doblegaría de nueva cuenta a Ucrania en unos cuantos días, sólo que en esta ocasión sus cálculos resultaron fallidos a tal grado que, 24 meses después, el conflicto se encuentra estancado frente a una relativa paridad militar alcanzada entre un desmoralizado ejército ruso, cuyos soldados no encuentran una razón moral para exponer sus vidas, y unos rebeldes ucranianos que dependen absolutamente del apoyo de occidente para sobrevivir frente a la escalada de Moscú.

El destino de Ucrania parece estar en manos del tiempo. Rusia apuesta al cansancio de los gobiernos de Estados Unidos y Europa cuyos presupuestos están muy limitados como para sostener una guerra de largo plazo, particularmente en un año electoral que en la Unión Americana podría encumbrar de nueva cuenta a Donald Trump. Por su parte, Ucrania está jugando sus cartas a la vietnamización del conflicto, con un desgaste continuo de  las fuerzas de ocupación.

En el horizonte no se vislumbra que Vladimir Putin vaya a capitular en su intención de ocupar la totalidad del territorio ucraniano. Hay que recordar que poco antes del estallido militar, publicó un ensayo en el que desconocía la existencia de Ucrania como país, para luego señalar que era un solo pueblo con Rusia. 

Dos años después, las tan cacareadas sanciones a Rusia, que tuvieron un alto costo a nivel mundial, siguen sin producir algún impacto en el conflicto. Moscú no ha dejado de colocar su petróleo en los mercados internacionales y, bajo la sombra, sigue desarrollando una creciente industria militar que pondría en riesgo a muchos países de la región, porque si Rusia se sale con la suya, Ucrania sólo sería la primera víctima en una larga lista.

Estos dos últimos años se volvieron una eternidad para millones de ucranianos que de pronto vieron cambiar dramáticamente sus vidas. De acuerdo a la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) más de 6 millones de personas debieron salir del país en busca de seguridad y otros cinco millones más se encuentran en calidad de refugiados internos. Y la guerra sigue…