Únete a nuestro canalLos retos de la joyería artesanal mexicana
Liderar una empresa mexicana de joyas artesanales es un reto, sin embargo, existen oportunidades que es importante reconocer.
La creación de joyas es uno de los oficios más antiguos que prevalecen como una actividad económica importante en nuestros días. Y es que su valor material, estético y cultural, se mantiene vigente porque incluso a través de miles de años, no ha perdido sus cualidades intrínsecas, que siempre nos han atraído a las personas.
De acuerdo con Rosana Sánchez, Directora de Citlali Joyas: “aunque hay una industria potente de producción masiva de piezas ornamentales, esta representa una competencia efímera para la joyería artesanal. Debido a que una pieza hecha en un taller, es única, fue diseñada con una intención particular, está hecha por las manos de alguien que heredó el conocimiento de generación en generación, y utiliza materiales que salieron de la tierra, a los que les tomó millones de años para convertirse en lo que son: plata y piedras preciosas”.
Liderar una empresa mexicana de joyas artesanales es un reto, sin embargo, existen oportunidades que es importante reconocer. Por ejemplo, que “la tendencia por lo mexicano viene de la mano del renovado interés por lo hecho a mano. Es un regreso de péndulo que devuelve valor a lo natural, a lo humano, a lo tangible. Un contrapeso frente a la tenebrosa llegada del metaverso y los NFTs, que ofrecen certificados de autenticidad a originales tecnológicos que nunca vas a poder tocar o experimentar, sino a través de una pantalla”, afirma Rosana Sánchez.
50 años de Joyas Citlali
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En estos 50 años de vida, Joyas Citlali ha evolucionado y se ha logrado adaptar, por ejemplo, a las nuevas exigencias del mundo virtual. “Particularmente en los últimos años hemos enfrentado los retos de un mercado cada vez más tecnológico, en el que ha crecido la interacción con los clientes a través de interfaces como Facebook, Instagram o nuestra página de internet. Sin embargo, aquí lo importante es mantener el ADN de la marca, creando diferenciadores; renovarnos, sin perder de vista de dónde venimos”.
En la visión de Rosana Sánchez, otro reto que identifica en la industria joyera nacional, es el de la inclusión. “Como casi todas las industrias, la joyería ha sido dominada por hombres. Aunque en este sector las mujeres empresarias hemos venido ganando terreno, resulta evidente que nos queda aún mucho por hacer para ganar liderazgo en el sector”.
“La calidad, la dedicación y el trabajo que les damos a nuestras piezas son un factor importante del éxito en estos 50 años, sin embargo, como Directora de Citlali Joyas, busco además ofrecer diferenciadores para nuestros clientes, incluso sin que estos sean completamente evidentes”.
“Pienso, por ejemplo, que es parte del valor agregado que ofrecemos, el hecho de que la mayoría de nuestras colaboradoras son mujeres; que algunas de ellas llevan hasta 30 años trabajando con nosotros; que la edad no es un factor, por ejemplo tenemos a personas mayores de 65 años con ganas de seguir en este bello oficio, y que somos flexibles y conscientes de las necesidades de nuestras colaboradoras”.
“En un día normal en Citlali, siempre ocurrirá la creación de alguna pieza única, porque esa es una de las características de la marca. En el taller se escucha el soplete y el motor. También puede ser que nos visite el hijo de alguna colaboradora, porque sucedió algo en su escuela (¡cómo olvidar los tiempos de la pandemia cuando el taller estaba lleno de niños!) Me queda muy claro que como líder soy copartícipe en una pequeña parte del sano desarrollo de la nueva generación de mexicanos”, finalizó Rosana Sánchez.
