Beatriz Rojas Martínez, diputada federal por el partido de Morena, denunció que la renta de vientres en el país es una industria millonaria que afecta a muchas mujeres, pero en particular, es fundamental prestar atención a lo que ocurre en las zonas rurales.
La diputada apuntó que las mujeres indígenas al estar en un modo de indefensión, viven condiciones de violencia y explotación durante la gestación, sobre todo cuando son enganchadas en el tema de la maternidad subrogada.
Por lo anterior, es que la diputada federal Beatriz Rojas Martínez presentó un proyecto de decreto que reforma algunas disposiciones de la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en Materia de Trata de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas de estos Delitos y de la Ley General de Salud, para que la gestación subrogada se tipifique como delito, con penas que vayan de los 15 a los 25 años de prisión y de 2 mil a 30 mil días de multa.
De acuerdo con una investigación de Eleane Proo Méndez, catedrática de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, de la UNAM, a nivel global las ganancias que genera la maternidad subrogada supera los 27 mil millones de dólares. Aunado a lo anterior, Rojas Martínez apuntó que hay empresas que cobran aproximadamente dos millones de pesos a sus ‘clientes’, sin embargo, las mujeres indígenas reciben pagos de 120 mil pesos.
En su discurso, la diputada enfatizó que en todo momento se deben de respetar y defender los Derechos de todas las mujeres a tener una vida digna, libre de abusos de cualquier tipo.