Marcelo en la ONU

Nunca había sido tan oportuno el canciller mexicano, haciendo funciones propias de su trabajo, acudió a la Organización de las Naciones Unidas para presentar formalmente una propuesta para crear un comité por el diálogo y la paz en Ucrania.

Hace meses el presidente de México instó al Consejo General de Naciones Unidas a buscar mecanismos diferentes para terminar pronto con la guerra con Rusia; sin embargo, no tuvo el menor eco. Hoy, a diferencia, parece haber encontrado ante el Consejo de Seguridad el interés suficiente para acelerar la búsqueda por una via diplomática, lo que terminaría con el conflicto y, sobre todo, dejaría de presionar el mercado de precios a nivel mundial.

Más aún, cuando apenas esta semana el presidente ruso, Vladimir Putin, convocaba a 300 mil reservistas para aumentar la incursión y arrancar la región de Donbás al gobierno central ucraniano, cosa que sólo aumentó la tensión.

Las consecuencias, más allá de lo moral, han sido de índole económica. A Estados Unidos y a los árabes les ha convenido absolutamente, a Rusia no, a Europa menos. Nosotros, México, hemos sido parte de los daños colaterales.

Inhabilitan a Casanova 45 meses

Con la novedad de que fue inhabilitada por 45 meses Casanova Vallejo, una de tres divisiones de la arrendadora Casanova Rent, de los hermanos Joaquín y Carlos Echenique Casanova, una de las empresas del sector de renta de vehículos más beneficiada por contratos del gobierno federal desde el sexenio pasado.

La circular de la Secretaría de la Función Pública informando de la inhabilitación fue publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el jueves 15 de septiembre, y originada en una queja presentada ante el Órgano Interno de Control en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

Cabe recordar que en octubre del 2021, el OIC del Instituto suspendió por tiempo indefinido la asignación del contrato de arrendamiento de 488 ambulancias por cuatro años, al presumirse que la licitación favorecía a una empresa. En enero de este año, Casanova, entonces proveedora, le fue asignado por adjudicación directa un contrato por seis meses por un monto de 113.3 millones de pesos, concluyéndose que hubo sobreprecio y procediéndose a la inhabilitación.

La contrarevolución de la mujer iraní

Se llamaba Mahsa Amini y su nombre podría convertirse igual en un sinónimo de una contrarevolución en Irán, que en el principio de una nueva era de represión como no se había visto en el país desde que en 1979 el ayatola Ruhollah Jomenei encabezara la revuelta que terminara llevándolo a convertirse en el líder político y religioso de la naciente nación islámica.

La historia, que a simple vista suena muy sencilla, encierra un trasfondo de vejaciones a las que han sido sometidas las mujeres iraníes en los últimos cuarenta años en una clara violación a sus derechos humanos. Mahsa fue arrestada por la policía moral conocida como Gasht-e Ershad, a la salida de una estación del metro en Teherán, su delito: no cumplir con las rigurosas normas en la utilización del velo. La joven fue subida a una patrulla y castigada violentamente por los oficiales en el camino a una estación de policía en donde apareció muerta horas después con el diagnóstico de “fallo cardiaco repentino”.

Miles de jóvenes, tanto hombres como mujeres, salieron a las calles a denunciar no sólo la muerte de Masha sino los abusos permanentes en contra de éstas, quienes desde 1979 se han visto obligadas a llevar un pañuelo en la cabeza, así como ropa holgada que oculte su figura para no despertar las tentaciones. No cumplir con estas estrictas normas puede provocar multas, cárcel e incluso hasta flagelaciones.

Aunque con motivaciones diferentes, las protestas recuerdan a las realizadas durante la primavera árabe hace diez años en donde los jóvenes apoyados por las redes sociales le dieron una visibilización mundial a su movimiento. Las autoridades iraníes lo saben, es por eso que en los últimos días que funcione internet es un lujo y ni qué decir de Facebook o Instagram.

Es difícil de predecir en que derivarán las protestas, pero un signo de que algo empieza a moverse a favor del cambio son las críticas, hasta ahora inexistentes, efectuadas por algunos funcionarios. Mohammad Bagher Ghalibaf, presidente del parlamento, se atrevió a señalar que la fuerza utilizada por la policía tendría que ser investigada. En igual sentido se pronunció, válganos, la Organización para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio dependiente de las autoridades.

No es que el gobierno de Irán se esté tambaleando, aún es tiempo que escuche la voz de sus jóvenes, mañana podría ser tarde.

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